.

Viajando de noche
sintiendo el viento fresco en la piel,
se da cuenta que hay algo que la mira, que la observa,
que esta acechándola desde lo más obscuro del espacio exterior.
La pupila del gran cíclope espacial,
la observa histéricamente,
nunca parpadea y siempre esta atento a sus movimientos.
Su pupila brilla tanto en el cielo,
ah...esta tan lejos.

-

a veces solo basta con respirar profundo,
y saber que estas,
acá.

el día

Me cansé de todo esto.

Me cansé de estar comiendo cemento todos los días

de estar cubierta hasta la cabeza por el asfalto.

Me duelen los oídos por el sonido a ciudad,

me duelen tanto los ojos de mirar tanto hacia arriba

buscando un pedacito de cielo

un poco de aire puro,

en vez de este aire estancado en las esquinas 

en cada rincón, 

el mismo aire a ciudad,

el olor a la tristeza,

el olor a vacio.

Y hay un árbol en una vereda,

que se esta muriendo.

Yo sigo acá en el pasto

escuchando un acordeón,

deleitándome con las nubes.

Atrás mío una autopista inmensa,

concreto, autos, estructura,

la verdadera carrera al nunca jamás.

Me prendo un cigarrillo,

respiro y sonrío,

tengo el sol pegándome en el cuerpo.

Necesito un manual para dibujar.

Brilla

El día más frío del invierno del año pasado, estaba sola, sentada en un banco en el parque centenario. Dibujé todo el lago, en mi cuaderno favorito. Tenía todas las cosas que me gustaban, arriba mio, sobre mi. La bufanda de lana colorida rodeando mi cuello, y el saco viejo de mamá. Hacía tanto frío, estaba helado, y en el parque no había nadie. Solo yo. Fui caminando hasta los puestos de libros, y había solo un puesto abierto, casualmente era mi preferido, donde compré todos mis libros. Y el señor, al que nunca le pregunté su nombre me invitó un café y me sonrió. Algo le brillaba en los ojos. Ese día tuve la charla más agradable y confortadora; y hablamos simplemente de cosas, tan simples, tan reales, tan verdaderas.

Y hace unas semanas, cuando era invierno. Estaba esperando el colectivo, recordé ese momento, y volví a sentir la paz, y el confort que había sentido ese día. Hoy ya es primavera, y me sigo sintiendo muy feliz.

Aire

Por las noches solo puedo leer

y de día el sol me quema la vista;

es como la gota que cae de la canilla,

la carrera eterna de las autopistas,

todos están tan apurados,

y yo, acá respirando.

Sentimiento roto.

Nadie nos dijo alguna vez

cómo deberíamos sentirnos,

nosotras,

en el pasto,

mirando el cielo.

Nadie me dijo que el amor era tan simple,

o complicado,

o simplemente amor.

Nadie me explicó del peligro,

que podría sufrir,

que me podían poner en un cajón oscuro,

olvidado, sucio.

Tal vez no quise aprender.

Y sí, quizás nunca escuché,

no quise escuchar.

No te escuché.

Me sentí tan protegida,

tan desnuda.

Nadie me dijo que iba a ser así.

Y es que sos tan pura y transparente.

Nadie jamás me dijo que te iba a conocer.

¿Cómo iba a saberlo?

¿Cómo iba a saber que ibasa aparecer así?

Me siento tan miserable,

tan triste y angustiada.

Pero no quiero pasar mis días en cama

llorando sobre mi almohada.

En este momento,

escribiendo estas palabras,

sos lo único que ocupa mi cabeza.

Ya me había pasado esto,

un par de días,

un par de semanas,

me olvidé y desapareciste.

Volviste, mon coeur.

Volviste a mis pensamientos.

Volviste a mi.

Astronauta.

De un alto parlante sonaba Obras Cumbres de Luis, y había un panorama, de un montón de personas moviendo sus cuerpos, sintiendo. 
Cerraban sus ojos y podían ver el universo desde afuera, desde adentro
oh no,
una lluvia infinita, Astronauta huis de acá, descalza.
Te vas.
En el nido, allá en las nubes con los astros, donde reposa tu ser,
puedo sentir el olor de tu nuca, el perfume de tu piel,
Astronauta te vas, ¿Te vas?.
¿Volverás?.
El perfume se desvaneció, viento sur.


A través de un vidrio empañado, te veo Astronauta;
recoges tu pelo, la nuca desnuda
el perfume
el momento,
el sentimiento.
La sensación,
tu respiración.

Amapola

Destruido todo. En las ventanas el último suspiro, papeles de diarios viejos sobre todo el suelo;
montañas de poemas de un poeta que no supo ser, que no supo respirar y sus sesos en la pared.
Sangre en las manos de ella. Amapola. Pero lo que sangra en realidad son sus sentimientos, cansados de ser usados por
Pero en lo más infinito de todo, en lo que nunca pensamos, Amapola. Por qué te vas?
Volves. Adiós, hola. da da da la da la dara ldara laraldlaslfk
Huracán Amapola, no puedo dejar de estar en el ojo de tu huracán Amapola. 
Amapola me llevas a lo más increíble, siempre a lo más.
Amapola me llevas a la irrealidad. Amapola me veo reflejada en tu piel.
Amapola amo tanto tu ser, ya no importa sobre donde estemos.
Volemos, Amapola, volemos.
Arriba, en lo alto. Nadie puede criticarnos, ya no existen las palabras.
Viento Sur.
Jugábamos entre pétalos. Amapola.
Un océano inmenso de tu sonrisa.
Ah...Amapola, no puedo ni mirarte a los ojos.
Tiemblo.
Me siento tan chiquita, diminuta.
Llorando en un rincón, dibujándote Amapola.
Montañas de poemas, Amapola.
Prendidos fuego en el medio de la habitación.
Pero volamos, Amapola, y ya no siento frío.

.

No esperes nada
ni de ti
ni de mi
ni del mundo,
te alejas del más allá
y tocas la guitarra acá
en mi cama
llena de plumas de avestrúz
me perdí hace tiempo
en lo que llamábamos
tus brazos míos.
Tus pestañas,
me lastiman la piel,
pero no sabes quien soy.
Me ahogo con mis propias palabras,
nunca se lo pude decir a nadie,
si me hago chiquitita,
y quiero la merienda a las seis de la tarde
y a las cinco p.m., la hora del té.
No me dejabas jugar con tus cuerdas
violonchelo,
¿Por qué te rompiste?

onírico.

Desperté en la noche buscando tu rostro, pero ya te habías ido;
bajé las escaleras, te busqué en la calle, simplemente habías desaparecido.
Me senté en un escalón, no supe que hacer, o como sentirme, hacia donde ir, que pensar. Me sentí tan vacía. 
Empecé a caminar. Fue solo un segundo en el que me paralicé.  Caí, golpee mi cabeza en el pavimento. Sentí mucho frío, no tenía abrigo alguno. Estaba cayendo en un inmenso hueco, mi cuerpo inerte caía, caía....no sentí nada, vi la oscuridad cubriéndome, me quemaba por dentro.
Pero tu ser, había desaparecido.
Habíamos desaparecido. Lo hicimos.

M

¿ Cómo puedo hacer para estar bien, si estoy rodeada de gente de mierda ?
De qué me sirve sentirme bien conmigo misma, si la gente que me rodea me hace sentir mal.
Quiero tomar vino hasta que se me salga por la nariz, y fumarme un atado de cigarrillos hasta que me queme la garganta.
Quiero llorar hasta quedarme dormida en mi cama.

mi amor.

Te tiras del precipicio, las lágrimas se desparraman por el suelo frío

los soles se van apagando, uno a uno, uno a uno;

y las mariposas nacen, duermen y se mueren en tu cama.

Por qué lloras chiquita?

pequeñita.

Quiero que siempre sea invierno, tener un buzo gigante todo el tiempo;

me perdí en tu boca, no puedo salir, ayúdame chiquita.

Respiras el aire más puro, en la cima de los árboles más grandes, en el campo, sí, en ese árbol que vivimos mil atardeceres-amaneceres; mil besos de buen día. 

Prendías la radio y bailabas, tu pelo se movía acariciando la piel de tu espalda.

Podes leer mis labios, nena? Podes?

Acaso no podes entender que sos lo más lindo que hay en este universo, y que me pongo cursi cuando te tengo que decir cosas? Que se me eriza la piel, que el corazón me late a mil. Que me tiemblan los labios y las manos, que no sé que hacer cuando te tengo enfrente.

Y nos dormimos en el pasto, en mis brazos, en el cielo, paraíso. Atardecer eterno, primavera todo el tiempo, que no es tiempo sino tu silencio. Música de fondo, para oídos que dejaron de escuchar hace años.

Léeme la piel, dibújame en otoño. Te saco fotografías en un bosque sin árboles, qué sentido tiene? Sino vos no estas acá.

astra .

Cráteres lunares,
anillos de Saturno,
soles lejanos
que se apagan en tus ojos.
Todavía no comprendo,
todavía no entiendo,
por qué no ves
lo que yo veo,
en tí
mon chéri.

Voyage.

Fui un pez
que navego en
el mar celeste-azul
cyan,
de tus ojos;
justo en ese momento
que se reflejaron
en un vidrio empañado,
en un bar al otro lado de un lago.
Había una japonesa
sentada en un banquito
un farol la alumbraba,
arriba en la superficie
se ponía el atardecer,
amarillo-rosa-violeta,
las aguas se ponian turbias;
ella miraba la nada
y todo.
Océano inmenso.
Me rosó con sus manos
pequeñitas,
todas mis escamas
texturadas,
abrió su diminuta boca
y de allí algo
magnífico 
fantástico
saco;
y sus labios inmensos
en un segundo
me comieron el rostro.
Jugaba todo el tiempo,
la japonesita
libre, navegando en las aguas
profundas
de mi mente;
ansiosa,
explorando los cuerpos celestes.

Casual.

Lo que pasa por tu mente
nunca es suficiente,
para desmayarte en el suelo
y estas muy perdida
en el abismo 
de mi habitación;
te me caes al piso,
ya no respiras, mi amor.

Te encontré acostada
sobre el pasto fresco
mojado,
al costado de ese laguito
lleno de patos blancos.

Te besé el rostro.

Los ojos grises,
desconcertados.
Las manos blancas,
y todo tu cuerpo 
tan 

if

Todo el tiempo 
música de fondo
el bajo, muy por debajo;
bajo por las escaleras
en lo profundo
y obscuro de
la galaxia más alejada,
me hundo.
Las luces fuera de foco
en las cabezas,
de los niños que no duermen
porque necesitan respirar
el aire puro del invierno.
Y tus labios frambuesa
se confunden con las luces
y los niños que respiran,
el invierno que no termina,
la primavera que no llega más,
y....respiro profundo,
me prendo un cigarro.
Viento
fresco
de invierno, que nos
enfría el ser
y nos hace sonreír.
Las narices rojitas,
y el millón de bufandas
de kilómetros de distancia
de vos y de mí.
Pero a pesar de todo
la noche más fría
el terror se metió
adentro tuyo.
Y no volves,
no volves más.

voyage.

Si te vas todo el invierno
quiero viajar con vos
en tu mente,
subconsciente.
Ser esa parte
de tu ser
inconsciente
que esta tranquila,
y que no se preocupa,
que respira.
Ser tus ojos observando
la luna llena desde Salta;
ser el aire puro del Norte,
y tu compañía en la eterna noche.

Frutas.

Sos mi fruta preferida
esa que se transforma cada día
para saber mucho mejor
que el día anterior.
Me pierdo en vos,
y pierdo el control.
Sino estás, volveré a Neptuno,
a refugiarme en el bosque,
entre mil bufandas rayadas,
y ochocientos sueters de amor.

Tortues.

Somos tan parecidos, tal vez nos dimos cuenta de ello, pero nadie lo dice, o nadie lo escribe en algún lugar. Somos tan parecidos en el sentido de que todos nos ocultamos en un montón de capas, para guardar adentro lo que realmente pasa. Nos ocultamos en nuestro interior las cosas importantes que no deberían salir a la luz. Ocultamos nuestra verdad, nuestras diferencias, nuestra particularidad, nuestra forma de ser. Cambiamos, pero nos seguimos ocultado, habrá sentimientos, tal vez, que nos guardamos y que queremos que sean solamente nuestros, pero por qué no expresarlos? Por qué no demostrarlos? Por qué? Porque guardar eso que es tan importante? Por qué llorar en la oscuridad? Por qué no pedirle a alguien que te abrace cuando sentís esa presión en el pecho, y el nudo en la garganta, y que por más lagrimas que haya en tu almohada ese sentimiento no se va a ir? Por qué no demostrar explícitamente el montón, la montaña de sentimientos, emociones, sensaciones que hay adentro de uno? Por qué es tan necesario guardarse una parte de todo eso? Por qué? Por qué el silencio? Por qué no hay respuestas? Por qué al amor? y por qué no? Por qué no sentirse bien? Por qué estar tan triste? Por qué no sentirse cómodo? Por qué no ver el lado positivo? Por qué el lado negativo? Por qué apartar la mirada, cuando unos ojos fijos te miran? Por qué negarse momentos y sentimientos y sensaciones? Por qué guardarse sentimientos? Por qué no hay respuestas para todo eso? Y para todo esto? Por qué no hay equilibrio? Por qué tan desequilibrado? Por qué no al sentimiento de sentirse amado y aceptado? Por qué no al sentimiento de hundirse en un profundo vacío? Por qué los extremos? Y por qué no un punto medio? Por qué no a un millón de cosas?
Me (nos), oculto en un caparazón, e invierno todos los inviernos de mi vidaS.

{

Yo amo tanto ser una

estar libre

sin preocupación

ser yo

con mi forma

mi ser

mi caparazón hermoso

que me protege ante todo,

mi piel

mis ojos observadores,

mis patitas chiquititas

que me llevan a cualquier lugar

sin apuro,

con tranquilidad.

Amo tanto

doy todo,

me importa tanto todo,

me gusta tanto el pasto

y la sandía.

Me gusta tanto ser yo.

Haberme encontrado a mi misma

y ser una.

}

Paréntesis.

Es un día tan domingo

y me olvidé de un montón de cosas.

Te dediqué toda una página

enorme, gigante,

de mi cuaderno preferido.

Me olvidé de mi,

y de todas las cosas que me gustan,

me olvidé de cuan dulce es mancharse la cara

cuando comemos en la cama

en el pasto,

sobre vos,

sobre mi.

Me había olvidado de lo dulce que es la sandía

cuando esta en tus labios;

había olvidado lo hermoso que es el invierno,

la naturaleza muerta,

los árboles desnudos,

muertos de frío,

como vos a la noche,

contemplando el vacío.

También me olvidé de tu pelo,

tu bufanda suave,

de tus labios frambuesa,

de tus dientes pequeños,

de tu sonrisa aterradora,

y de tus ojos negros.

Todos los momentos

son como cuando miras la oscuridad,

absoluta, silenciosa, vacía y temerosa,

sabes que hay cosas

que no entendes

que te perdes,

que te olvidas 

y no recordas más.

Olvídate de todo,

por mi,

pero más por vos.

No recuerdes lo olvidado,

que no te duela el ser golpeado

que no le temas a mi cariño,

que no.

¿Y por qué no?

¿Por qué tan preocupado?

Hay mil cosas

y mil momentos 

que no pasaron, que pasarán

que son más importantes,

y menos.

Y no menos.

Sino todo. 

Sé que entendes todo

cuando me miras,

y tu mirada se desvía,

-encontrando la mía,

yo no puedo evitar mirarte a los ojos

si me miras los labios cuando te hablo

y me observas fijo.

No soy buena para esto.

Perdón, pero yo sí te....

Y también me....

cibernético.

Para ti, la chica atrás de la pantalla que esta leyendo esto.

Con sus ojos color marrón,
y el pelo corto,
con labios finos,
y con una sonrisa tímida.
Sí, para vos mon chéri.
Que te sentís mal,
que no sos vos, sino otra,
que te conozco de a poco
y que no te conozco.
Hoy es un día para escribir
con la letra grande
visible, increíble.

Mejórate darling.

Si te sentís así,

y no tenes a donde ir,

dime a mí,

y te llevaré a donde 

todo te haga sentir feliz.

El planeta que quieras,

la galaxia que más te guste,

el río de helado más delicioso.

Existe un planeta que se llama

Sedna.

Casas de campo,

techos altos,

no existen las puertas,

solo hay ventanas,

ventanas gigantes, para poder escapar,

ir hacia ....

Hay un planeta que queda

en Andrómeda,

hay vinilos de las bandas que te gustan,

ahí cantan todo el tiempo.

Hay una galaxia

que no es la vía láctea,

ahí se guardaron todas las cosas buenas,

lo bueno y verdadero,

esas cosas que no se tienen que perder.

Y en Saturno esta lo nuevo, lo que cambia,

lo que tenes que encontrar,

hay un millón de cartas 

que tienen tu nombre Paloma.

Todas dicen lo mismo,

y otro millón no.

Todas esas cartas dicen:

Querida Paloma:

No estes triste hermosa-preciosa,

cuando estes leyendo esto,

te vas a sentir mucho mejor.

Porque sos 

Fui.

Una terrible persona,
maltradadora,
pésima en todo.
Una persona insatisfecha,
que no sabía diferenciar las cosas,
no sabía diferenciar.
Una persona que no sintió nada
por nadie,
por nada.
Que no supo compartir,
que sufrió por cosas sin importancia,
que lloró muchisimo,
que abuso del llanto,
que no aprendió un montón de cosas,
que dejo pasar oportunidades,
que no se acepto,
que se odio,
que le salía todo mal.
que no disfrutaba de los momentos,
que no tuvo.
Fui una persona incomprensible,
incomprendida.
Fui una persona cualquiera,
que decía cualquiera,
que hacía cualquiera.
Que no sabía lo que quería,
que dudaba muchisimo,
que dudaba todavía más aún.
Que no quiso expresarse,
que se negó rotundamente expresarse,
que negó todo, absolutamente todo.
Odié muchisimo
y me envenenó un montón,
pero hoy, en este día nublado de invierno,
me amo.

La entrada kbza1.

[Lo transcribo de mi nuevo cuaderno. 
El cuaderno se llama Franz.]

Son las 2 a. m.
Estoy escuchando
the smiths,
y la concentración
se fue a pasar 
con mi imaginación.
Yo la tengo.
Me tranquilizo,
se me calma el cour,
quisiera saber más
de eso que no sé
y hacerte mil
ochocientas
preguntas.
Miércoles.
Me quemé las manos
maldito-delicioso café,
que idiota que soy.
Nunca más voy a 
borrar esos temas de mi
celular.
Hoy me llamé Mauro,
y fue genial ser batman.
Tenía la super remera cool moderno;
y me comí todo re 
rápido, porque en mi vida
de adulto no tengo tiempo,
y tengo plástico, todo es gratis,
no me gusta tener pasta encima.
Amo los subtes porque no hay
mejor viaje que éste, y que ese;
y mientras tanto para no
desperdiciar el poco tiempo
libre que tengo, me pongo
a cuestionar todo.
ESTO NO ES UN POEMA,
porque pomela no puede sabe
escribir poemas.
Y sí, cuál ay? Voy a escribir
to2 mal, rebel-rebel.
[sos el mejor britny spir
del mundo.
Y tenez una voz re linda,
y quiero poner un millon de ys.
Y eso no es una erre,
vos sos una erre,
y sí, todo azá.]
Me gusta tu . . . .
[Esta parte no la voy a transcribir 
porque no da.]

Poema 1.

Los agudos por la mañana

son tan bellos como los pájaros que cantan

cuando apenas se oculta la luna,

cuando apenas se asoma el sol,

cuando comienza el equinoccio de primavera,

cuando me pierdo en vos.

Como tu voz a mi oído,

con cada despertar

llena mi ser con un placer

que no se puede explicar.

Ni aunque supiera todas las palabras

en todos los idiomas.

Con las lenguas muertas

llegamos a un éxtasis,

al éxtasis del silencio

a un placer inmenso.

Esperamos las estaciones en silencio,

un silencio sepulcral.

Nos morimos en los bosques de Canadá,

y nos abrigamos en el frío glacial.

Me abrigo en vos, mon coeur,

mon chéri.

The list.

Esta va a ser mi lista de las cosas que:
- devilstick.
- nips.
- mochila.
- cámara analógica cool.
- dibujar bien
- amarme y quererme mucho
- donar sangre
- Libros: rayuela, lolita.
- francés y alemán, y ruso.
- tatuaje
- dibujar mucho mejor
- encontrar el nirvana
- escribir mil poemas en verso
- amar más
- respirar más,
- buscar otras listas
- hacer más listas
- ver si tengo un problema con las listas
- recordar algo que olvidé [hacer un poema sobre eso]
- no llorar
- no lastimarme y no lastimar
- acordarme de que no todos piensan y sienten como yo, 
- hacer un libro
- tachar cosas que no taché[ver todas las listas]
- hacer cosas que no hice[ver lista]

[pome acuérdate de leer esto, tonta.]

m

1

Sí, a vos que estas leyendo esto.
Vos que me dijiste que no,
que preferis el alcohol y el paco,
a vos que no queres ir al cine a inyectarnos animación3d;
me caes mal.
La desilusión.
Me haces shorar.
Chau.

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2

Me acordé.
Todavía me duelen los ojos
por haber visto
una tercera dimensión.
No me gustó,
porque la dimensión que a mi me gusta
es la desconocida.
Es que sos
un gato atigrado,
que te faltan los colmillos
y los bigotes negros.
Tu lengua áspera,
tu actitud áspera,
punto.

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3

Hoy.

es un día nuevo
es un día distinto
es un día que cambia todos los días
es un día que desee tanto que llegara
es un día que no quería olvidar, pero lo olvidé
es un día que el sol no brillaba, pero cuando salí a andar en bicicleta los rayos de sol me quemaron los ojos, y todo ardió,
es un día como todos esos días que son especiales, pero no tienen nada de especial
es un día que me siento bien
es un día que me gustaría saber tocar la guitarra que tengo ahí tirada;
es un día para escribir muchos poemas, o escribir lo que siento en prosa, un texto, varios párrafos, un millón de letras;
es un día que me gustaría estar todo el día en la cama en piyama;
es un día que me gustaría estar un buen rato bajo el sol, en el pasto, escuchando el silencio,
es un día que te conozco;
que aprendo muchas cosas que no sabía;
que me pongo los anteojos para ver mejor;
que me amo y me miro y me quiero,
que te quiero, que no y que sí, negación.
Es un día que nunca creí que fuera otro día distinto, pero lo es, o no? No, sí. La primer respuesta.
Es otro día, uno nuevo, uno mejor, uno cambiante, uno más lindo.
Y hoy me sigo sintiendo mejor, mejor que ayer, y tal vez mejor que mañana. O tal vez no.
No me gusta esto que estoy escribiendo.
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Hoy es 2 de Julio del 2013.

Hoy es un día increíblemente hermoso. Hoy me pinté los labios de rojo carmesí para tí.
Hoy estoy tan alegre, pero estoy muy bloqueada como para escribir algo.

Vías.

Todavía sigo navegando en el bosque
perdida entre arroyos congelados,
hace tanto frío aquí,
es que estoy tan sola en este inmenso planeta.
Me abrigo con todo lo que tengo y salgo.
En la estación de trenes a lo lejos
las nubes se transforman en vías
y las vías son nubes,
el cielo esta lleno de estalactitas
mil ochocientas gamas de colores,
me confundo, transpiro en frío, me acurruco en el banco.
El tren sale mañana.
Tengo todo un día para descubrirme a mí,
para encontrar algo más de mí.
Recuerdo.
Recuerdo un montón de miradas observándome,
un millón de estrellas en el cielo, que se van muriendo,
que se van apagando, y nadie las ama,
ya casi nadie se acuerda de esos pequeños soles
en la galaxia, en el universo,
¡ acuérdense, acuérdense !

No sé escribir en verso,
nunca supe cómo, pero no me importa,
la prosa es mucho mejor.
Una vez me leíste un cuento para niños,
me lo diste, mi amor.
Me sentí una niña, matilda.
Estoy tan feliz,
nos perdemos, amamos perdernos,
nos encanta, nos fascina.
¿Y qué es el amor?
A nadie le importa la respuesta,
sigue habiendo silencios.

¿Qué pasaría si hoy te encuentro?
¿Qué pasaría si hoy nos vemos?
¿Qué pasaría si hoy nuestras miradas perdidas se cruzaran?
¿Qué pasaría si te cuento una historia?
¿Qué pasaría si te quiero, chiquito?
Todo el tiempo hago listas
listas, y listas de lo que quiero,
de por qué sí.
¿Y por qué no? Ésta es la que más gusta.

¿Y por qué no a todo?
¿Y por qué no a ser así todo el tiempo?
¿Todo?
Me encontraste.
Ya es mañana, y la locomotora esta muy caliente,
hay que irnos a otro lugar.
A encontrarnos en otro punto cardinal.
Me pierdo y me encuentro en vos, chiquito
ojalá fuéramos....

Tiempo.

y por qué no
por qué no ahora,
por qué no en todo este tiempo que tenemos,
por qué no en la nada,
por qué no en el pasto,
por qué no en el campo?
Me sentí más cómoda en la oscuridad,
en el silencio,
un silencio en el bosque,
un silencio apreciando un amanecer-atardecer,
un silencio contemplando las olas en el mar, en el océano;
Ese mismo silencio,
ese silencio que era la respuesta a todas mis preguntas,
tu mirada era más silencio que el silencio.
Escribía mis cuentos y poemas en máquina de escribir,
yo nunca supe si te gustaban
nunca supe si te gustaba algo,
solo el silencio.
Cuando hicimos ese viaje por la ruta,
esa ruta,
esa ruta interminable y tan lisa, tan suave...y
ah, el bosque.
Los pinos y eucaliptos, ese aroma,
el olor a margaritas,
el olor a tierra,
el olor de tu pelo mojado,
me llena de suspiros recordar.
Nos perdimos infinitas veces, perdíamos la noción del tiempo,
permanecimos días enteros sin encontrarnos,
la espera era excitante,
y el encuentro un orgasmo.
Quería tanto esa tranquilidad tan tuya, tan mía
la paciencia
la espera
la paz en tu mirada,
en tus ojos avellanas,
en el silencio permanente de tus labios
que se movían solo para chocar con los míos,
con mi piel, con mi ser.
Y al amanecer cuando escuchábamos jazz,
bajo, como un murmullo,
me besabas el rostro con tanto cuidado
parecías una ola
acariciándome la piel.
Tu pelo por toda la almohada,
por toda la cama, por toda mi cara,
sentí que me asfixiaba,
sentí que ya no respiraba, y no lo hacía,
pero no me quejé, porque me sentía bien.
Me sentía bien.
Abriste las ventanas, entro la luz tenue del sol recién salido,
un aire frío me golpeó el alma,
estábamos flotando a la deriva,
estábamos en el lugar que queríamos estar,
acá.